Aquella nocturnal fiesta

Fui del aire

como en locura

fui luna menguante

como en lengua

de luz fina

Me han

venido a buscar

los secretos rostros

de antifaz colorido

caudal volante

río veloz

Soy agua

en movimiento

de sábana de lluvia

torcaza aprendiendo suave

cómo suspira el viento

peligroso cómplice

murmurador

Beso voraz

maquillada boca

encaje y satín negro

mejilla teñida en carmines

la prenda perfecta de flores vasta

música predilecta de murga

fui diosa milagrosa de

jolgorios jubilosos

y ternura

¡ Cómo regresó riendo la vida en aquella nocturnal fiesta!

Paloma Negra

Tertulia circense

Es ese rasgo de ternura directa y fugaz

que provoca en mí eternidad de risa...

Han plantado en mis tierras

un brote de silencio y complicidad

robando como delincuencial fragmento de noche

días y días de comisuras estiradas...

¡AMADA VIDA CUÁNTO TE ADORO!

Paloma Negra

Trova del deseo triste

No llores corazón alado

que de tus venas abiertas

cuelgan versos dorados

y perfume de azaleas

Resiste la insolente herejía

que sobre tí se yergue

que un lamento de mediodía

vendrá contigo a mecerte

No me llores, no me salves del absurdo

despierta de ceniza al candor ardiente

de los muslos sometidos al amor amante de esta luna de nácar

Absorbe corazoncito desterrado

el mundo efímero de lo bello

los pliegues del lecho mojado

el sepia de lo añejo

Clava tras la piel renaciente

una nueva herida para recordarle

que de musa de amanecer doliente

viniste mis pasos a robarte...

No me llores, no me salves del absurdo

despierta de ceniza al candor ardiente

de los muslos sometidos al amor amante de esta luna de nácar

Culpable

Por consiguiente y opóngase quien se oponga

evadiendo toda ley y hechos probables

me declaro en rebeldía firmemente feliz...

Paloma Negra

Sabias piedras del camino

¿Qué sabes tú pasajero inconsciente de mis supremos temores?

solo lo se yo y mis espantos

esos fantasmas que viven en el otro piso

esas voces que aparecen en sueños

que me tocan el pelo

y aparecen en el patio vestidos de blanco

No sabes nada de mí bufón de colores complementarios

de mis tristezas hechas de tizne azul

o de mis llantos escondidos tras el atril en el otro cuarto

Me ves sonreir y bailar

cual gitana danzarina de faldones rebuscados

y de cuanto amo no apatecerán ya los hombres

ni de cuanto gozo conocerán mis serpientes amarillas

desiste de tu búsqueda de mí...

de tus alegres cascabeles

que de mis estertores y risas

solo sabrán las piedras que piso

cuando del suelo me recojo con cuchara de té...

Paloma Negra