lunes, 17 de enero de 2011

Exiguo anochecer sin nombres

Y mientras sonaban las trutrucas milenarias
recordaba de ti todo,
ibas sabiendo a despedidas
y mientras mi libertad era de amores volantineros
te ibas al norte de la distancia

Quisiera tallar en pino oregón un baúl de candado antiguo
y olvidar su ubicación
dejándolo perdido entre las letras de canciones donde no mis acuarelas no caben

Se me derrama el rojo
sobre el verde del sur
donde debí dejar el alma metida en un bosque sin acceso

Debí tanto debí deber
pero los lápices son porfiadas extensiones de querer indomable
de esos que escriben cartas jamás enviadas
encargan regalos lejanos
llenan blogs de sensaciones
y rayan amor en muros no deseados

Pobre esquinita adolorida
que goza de venas abiertas
donde aun brotan flores tiesas
golpeadoras de ventanas



Paloma Negra



No hay comentarios:

Publicar un comentario