Convertidos al paganismo
recordando las viejas costumbres
destilados de evocaciones
de gritos, de deseos reprimidos
fuimos despidiendo el atardecer
contenido en quince meses
multiplicados a su vez por unas cien lágrimas
a las que una vez cristalicé en versos...
Declaraste locura temporal
o quizás eterna ... quien sabe
enfermedad de la que no me hago cargo ahora
y yo pobre mundanal mujer de barro
fui nombrada diosa precolombina por un par de horas...
por ese poder innegable de la fusión corpórea
Dejar plasmada la agonía
es el último testamento de ese amor extinto
Regreso a mi calidad de demasiado humana
completo mis silencios con frases entrecortadas
y relleno la habitación de aires nuevos
dando la bienvenida al día feliz...
Paloma Negra
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